Esta historia que nos llega de la mano de Pedro Brotini Villa y hay que reconocer que es magistral la forma en que se enfrentan el más puro materialismo, no sin una cierta razón detrás, y el sentimentalismo, ante la pérdida de un ser querido y aquello que nos es una gran fuente de recuerdos.Tras la muerte de Román, el difunto marido de Angélica y un auténtico enamorado de los coches, ésta se encuentra con una deficiente situación económica, de la cuál dificilmente podrá salir si no vende el maravilloso Volkswagen 1500 Tipo 3 que su marido dejó a medio restaurar. Por un lado, Martín, abogado y antiguo amigo de Román, la asesora de tal forma que la única salida a su situación actual es venderlo al mejor postor. Pese a que se muestra reacia a la idea, decide hacerle caso, pero se encuentran con el hecho de que la suma de dinero que obtendrían la la venta del coche en su estado actual, es poco beneficioso. Así, Angélica decide llevar a cabo la restauración del automóvil y ponerse en contacto con algún mecánico que esté interesado en ayudarla en dicha tarea.
Tras algunos encuentros que no terminan de cuajar, recuerda al joven mecánico con el cuál Román solía trabajar. Aunque se encuentran con algun que otro problema para hallarlo, éste se presenta en casa de Angélica, dispuesto a ayudarla por el afecto que siente por Román, quién le enseñó prácticamente todo lo que aprendió a lo largo de su vida acerca de los coches.
Durante el transcurso de la restauración, Angélica y Abel se convierten en confidentes. Así, mientras Angélica le cuenta acerca de cómo se conocieron ella y Román, Abel, por fin, se abre y muestra qué le hace sufrir en las entrañas de su corazón: aún no ha sido capaz de olvidar a Lucía ni los sentimientos que aún residen en él.
Tras algun que otro descubrimiento, y una vez terminada la restauración, llega el momento de decidir en función del futuro. ¿En manos de quién recaerá el automóvil? ¿Se convertirá de nuevo en algo importante para el nuevo propietario? Estas y tantas otras preguntas, serán resueltas tras su lectura.
Lo que es seguro, es que ninguno de los dos podrá olvidar jamás al 1500, debido a que gracias a él, ambos han recuperado algo: Angélica vuelve a ser capaz de escribir y Abel recupera a la que es el amor de su vida.
Ambos creyeron en el poder de las palabras azules, sin tener miedo a la huella que la vida nos deja.
"Cuando oigo a alguien decir que el amor a primera vista no existe, no puedo evitar sonreír por dentro. Quizá para ellos sea una invención, pero sólo porque no lo han vivido, no han experimentado la certeza de ver un rostro y saber que ha llegado el momento de no buscar más, de detenerse. Ves un gesto, una determinada forma de moverse, y sabes que quieres ver a esa persona a tu lado toda tu vida, y que si no la consigues enamorar, conquistarla, dará igual todo el éxito o lo que puedas llegar a conseguir por muchos años que vivas. Si no estás con ella, no tienes nada, absolutamente nada."
A medida que me he ido leyendo la reseña y he ido haciendo cambios de imagen y diseño, tengo que decirte que me ha gustado. Me ha llamado la atención, así que en cuando acabe con los que ahora tengo en manos, me lo leo yo también :)
ResponderEliminarpd. prontito voy a ver si hago yo una de mis reseñas :3